Mi papá siempre decía –Linda, tienes que escribir un libro-. Cada vez que venía a nuestra casa y me consentía, botado en el piso, mientras escuchaba el último y aún más increíble concepto veterinario de los labios de mi mamá: –Linda, ¡tienes que escribir un libro!-. Cada vez que ella le relataba algún nuevo episodio de nuestras apasionantes vidas repetía, muerto de la risa –Señorita Guacharaca ¿para cuándo su libro?-.
Hace un año mi mamá y yo hacíamos las maletas para cumplir la promesa que hiciéramos esa Semana Santa de 2015 en la isla de Providencia, cuando supimos que nunca volvería a oírle llamarme “Señorita Guacharaca” rascándome la barriga. Durante las tres semanas que pasamos en Hacienda Betania, un recoleto hotelito en las montañas de Guasca, le dicté todo lo que recordaba de nuestro primer año juntas, un año lleno de lágrimas, preocupaciones, amenazas, avances, amor extremo, sorpresas, viajes y aventuras, también extremas.
Seguramente en estos momentos te estés preguntando qué carajos estuve haciendo todo este tiempo, que aún no tienes el primer tomo de mi apasionante biografía entre tus garras…
¡¡¡Te cuento que YA MUY PRONTO será así!!!
En primicia y exclusiva te cuento la odisea editorial de los últimos meses…
¡Prepárate para un suspense sin límites!
(Eternas sesiones de corrección del manuscrito de mi opera prima: «La vida es Linda»)
Continuará
Linda tus historias son bellas o mejor dicho lindas como tu, y cuando escibes de tu papi, se nota el amor que sientes por el….. Esta es una de las tantas razones que tengo para seguirte y esperar tus aventuras con tantas asias……besos y rascaditas de panza.
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¡Mil gracias por tu cariño, Liliana! y bienvenida nuestra odisea editorial, que fue realmente escalofriante… 😀 😛
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No veo la hora, tengo la cara que tienen Montse, Drako y Félix cuando estoy sirviéndoles la comida. Me encantará leerte cada día.
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Querida Lina, te imagino perfectamente, ¡espero no vayas a babear el libro cuando lo tengas entre tus garras! 😀 😛 😛 😛
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Siento una emoción al leerte que me siento viviendo tus experiencias y metida en tu corazón y en el de tu mami, a pesar de las dificultades siempre le encuentras el lado positivo y divertido a todo, quiero tener tu libro pronto y me identifico con lo escrito por Liliana Ibarra
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Querida Olga, ¡mil gracias! El positivismo y la diversión son una una especialidad perruna… ¡Ya muy pronto tendrás en tus patas varias decenas de páginas para comprobarlo! 😉 😀
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Mi Linda y mamita, si todo sale bien estaré en Colombia para las vacaciones de Navidad. Así que espero poder conseguir una copia de tu opera prima, ojalá patagrafiada por ti para mostrársela a Oreo 🙂
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¡¡¡Auuuuuuuuuuuuu!!! ¡Qué buenas noticias! ¿Quieres decir que podremos conocernos perronalmente? ¿Y que no tendré que aguantarme los bufidos de Oreo? Seguro que para entonces puedes llevarle mi increíble biografía, dedicada y patografiada, a mi amiga en la distancia 😀
Un gran lametón para ambas 😛
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Jajajaja pues esa es la idea, vamos a ver si se concreta en esta semana. Ojalá podamos conocernos perronalmente 😀 y tranquila que Oreo no vendría en este viaje conmigo, así que no habrán arañazos de cariño para ti jajajajaja
Purrrrrrs para ambas!
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Querida Linda: te sigo desde tu artículo en un periódico nacional..desde allí me volví tu fan junto con Lorenza. Mi prima de Medellin quien ama los animales también es tu fan..y otras personas a quienes les comparto tu linda forma de escribir! Te llevamos en nuestro corazón y esperamos tu libro autografiado con tu garrita..besitos
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¡Qué emocionante, chicas! 😀 ¡Y yo espero poder entregárselo a todas en perrona! 😀 😛
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